Mientras
masticas, la publicidad no te afecta
Según un estudio de la
Universidad de Colonia, en Alemania, se ha podido llegar a la conclusión de que
mientras masticamos, somos inmunes a la publicidad
Cada vez que vamos al cine, los espectadores tenemos que tragarnos una
serie de anuncios antes de ver la película, por la que hemos pagado. Los
expertos en marketing utilizan una serie de técnicas, ya sean psicológicas, con
la repetición de eslogans o con canciones fáciles de recordar, para asegurarse
de que no nos olvidamos el nombre del producto o marca que se anuncia.
Sin embargo, un grupo de investigadores de la Universidad de Colonia, han
descubierto que masticar irrumpe nuestro “diálogo interior”. Los científicos lo
achacan a que, cuando descubrimos un producto por primera vez, los labios y la
lengua simulan automáticamente la pronunciación del nombre sin que nos demos
cuenta, y así, el cerebro retiene mejor la información.
Pero si masticamos un chicle o masticamos comida mientras vemos un anuncio, este fenómeno no se produce. Cabe
decir, que los resultados se han basado en estudios realizados, comparando los
efectos que produce masticar comida durante efectos de no masticar ningún
alimento. Por lo tanto, son datos bastante fiables.
De momento la investigación no ha levantado demasiada polémica, pero si el
caso llegara lejos, las empresas de marketing estarían dispuestas a prohibir la
venta de palomitas en las salas de cine. ¿Os imagináis un cine sin palomitas?
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